Foto Radio YSUCA, Ramón Padilla
Los Acuerdos de Paz establecieron una reducción del gasto militar y del número de efectivos. Sin embargo, el presupuesto ha pasado de 80 millones de dólares en 1992 a 224 millones en 2020. Y de aproximadamente 50,000 elementos militares que fungieron durante la guerra debía reducirse a la mitad. Sin embargo, el actual gobierno ha ordenado que las filas castrenses se eleven a 40,000 militares.
Esto es preocupante en un contexto de persecución política en el país, dijo la investigadora en temas de seguridad pública y prevención de la violencia, Jeannette Aguilar.
Para Aguilar, los militares están más cerca de recuperar el poder hegemónico como en la época de la guerra, por lo que llamó a la población a estar atenta a las reformas a la Constitución que se presenten el próximo mes de septiembre.
Según Aguilar, en términos jurídicos, es facultad del Presidente de la República fijar el número de efectivos policiales y militares que requiere el país, pero el actual Gobierno no cuenta con un criterio técnico que justifique el aumento militar.
La investigadora explica que se tiene una fuerza policial de 28 mil elementos con cobertura nacional, es decir un promedio de 450 policías por cada 100 mil habitantes, más de los que recomienda la ONU como mínimo para asegurar la seguridad: 300 por cada 100 mil habitantes.
Para Aguilar no se requieren más policías, ni más militares en tareas de seguridad pública, sino políticas territoriales eficaces, en las que se tome en cuenta a líderes comunitarios y a las alcaldías.
