Desde ciertos actores institucionales se ha sembrado una tesis de que los defensores de derechos humanos, sobre todo aquellos que ejercen una postura crítica sobre las acciones institucionales, son actores sociales que tienen una agenda oculta relacionada con actores políticos más tradicionales. Esto es falso, según Jorge Rodríguez, coordinador técnico del Observatorio Universitario de Derechos Humanos de la UCA, OUDH.
Incluso desde los organismos internacionales se reconoce la importancia de los derechos humanos para que una sociedad sea plenamente democrática. Sin embargo, en el país se ha generado un ambiente hostil para la defensa de los derechos humanos, según Rodríguez.
El Observatorio Universitario de Derechos Humanos de la UCA, OUDH, publicó recientemente un informe sobre defensores y defensoras de Derechos Humanos en El Salvador durante 2019 y 2020, en el cual se registran ataques digitales, restricción de acceso a la información pública, intimidaciones, precarización laboral, agresiones y amenazas.
Las vulneraciones a defensores de derechos humanos también toman relevancia en el interior del país sobre todo contra quienes ejercen la defensa al derecho a la propiedad y a una vivienda adecuada, la defensa de los derechos de las juventudes, del derecho al medio ambiente y la defensa del derecho de migrantes y de quienes sufren desplazamiento forzado.
En el marco normativo nacional no existe una tipificación de vulneraciones hacia los defensores de Derechos Humanos. La Mesa por el Derecho a Defender Derechos presentó una propuesta de ley pero esta fue archivada por la actual Asamblea Legislativa.
Para Jorge Rodríguez hay un panorama sombrío para los defensores de derechos humanos en el país.
El coordinador técnico del OUDH hizo un llamado a la población para que tome una actitud crítica ante las acciones institucionales que vulneren los derechos humanos en el país y que la ciudadanía respalde a quienes ejercen una labor de defensa de los derechos humanos.
