“No hay nada que celebrar en el Día Mundial del Agua”, “lucho por la vida y por la defensa del agua”, esas son algunas de las frases que diversas organizaciones de la sociedad civil exclamaron.
En el marco del Día Mundial del Agua, diversas organizaciones ambientales se presentaron frente a la Asamblea Legislativa para reiterarle a los parlamentarios que urge una Ley de Recursos Hídricos, que en realidad garantice el derecho humano al agua.
Según Omar Flores, integrante de la Mesa por la Soberanía Alimentaría, la Ley de Recursos Hídricos aprobada por los diputados en diciembre del año pasado no está resolviendo los problemas del país. Se siguen priorizando los proyectos de familias influyentes. Claros ejemplos son el río Sensunapán y Valle El Ángel, proyectos que siguen siendo apoyados por el Gobierno, aunque con ellos se afecta los mantos acuíferos y, por ende, a la población.
Las organizaciones enfatizan que la Ley, conceptualmente reconoce el derecho humano al agua, sin embargo, no existen mecanismos apropiados que garanticen ese derecho, pues solo es letra y no acciones contundentes, señala Luís González de la Unidad Ecológica Salvadoreña.
González dijo que la normativa que entra en vigencia en julio próximo debe ser reformada, pues hay varios artículos que no dan garantías de acceso al agua, participación ciudadana, saneamiento y calidad y las Juntas de Agua han quedado fuera de la ley.
Tanto el Foro del Agua como la Alianza Nacional contra la Privatización del agua le recordaron a los diputados y al Ejecutivo que el agua no nace en los chorros y que si no le ponen el debido interés las consecuencias son graves en el futuro.
Las organizaciones ambientalistas presentaron, en el marco del Día del Agua, una carta donde hicieron ver a los diputados los graves daños que la ley ocasiona al dejar de lado a las Juntas de Agua, que han abastecido a las comunidades cuando el Gobierno no ha podido garantizar el líquido a toda la población.
