Juntas de agua deben hacer un pago simbólico por el uso del recurso hídrico

Foto Radio YSUCA

La Autoridad Salvadoreña del Agua, ASA, está elaborando el reglamento con el cual la Ley General de Recursos Hídricos podrá desarrollar las normas jurídicas de cómo esta ley se aplicará. 

Los  miembros del Foro del Agua y de las juntas de agua han visto que esta es una buena oportunidad para que El Salvador garantice el derecho humano al agua, que está  abandonado por el Estado. 

Debido a ello es que han surgido las juntas de agua, las cuales abastecen al 25% de la población salvadoreña de zonas rurales y periurbanas, sin embargo hoy están en una encrucijada ya que la Ley General de Recursos Hídricos los visualiza como empresas. 

Si bien a través del artículo 109 de la ley se ha determinado la obligación del pago del canon por la extracción del agua, incluyendo a las juntas, la misma ley no determina con exactitud cuánto se pagará. Esto deberá determinarlo la Autoridad Salvadoreña del Agua, ASA, de acuerdo con el artículo 110, señala Dalia González representante del Foro del Agua.

González dice que este cobro debe de romper con el modelo de injusticias que tradicionalmente ha favorecido a la oligarquía y a empresas que siempre han gozado de este servicio, lo han contaminado y lo quieren agotar.

Por el contrario, las juntas de agua brindan el servicio que el Estado no da a las familias pobres de muchas zonas del país, por ello debe establecerse un pago simbólico, pues no se están enriqueciendo con su uso.

Más de dos millones de personas reciben agua potable por medio de las Juntas de Agua en el país, señala Milton Ramírez, de la Asociación Rural del Agua “Fuente de Agua Viva” del cantón San Laureano, ARAFAVI e integrante del Foro del Agua. 

Ramírez dijo que las juntas comunitarias de agua están asfixiadas económicamente por los grandes costos de operación que se generan para su mantenimiento: bombeo, limpieza, saneamiento y pago de energía eléctrica. Estos sistemas trabajan con esquemas bastante precarios, enfatiza.

Los representantes del Foro del Agua señalaron que La Ley de Recursos Hídricos tal como está aprobada y en las condiciones de crisis fiscal que enfrenta el país, es un territorio de nadie. Por ello dicen que si se implementa, de manera justa o injusta, va a depender de la acción que tomen los grupos interesados.

En ese sentido se vuelve un asunto urgente la elaboración y aprobación de un reglamento que desarrolle herramientas y genere mecanismos concretos para promover los intereses y evitar impactos negativos en los sistemas comunitarios.