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El derecho a la protesta está relacionado con el derecho a la libertad de expresión y con la participación ciudadana, que se visualiza a través de las marchas. El derecho a protestar está reconocido en la Constitución de la República y en convenciones internacionales y solo se puede limitar bajo criterios específicos como un régimen de excepción, explica la abogada de Cristosal, Ruth López.
Sin embargo, actualmente la violación al derecho a la protesta o manifestación se está limitando no apegada a derecho, ya que no hay una normativa que lo impida.
Colocar retenes en las carreteras previo a las marchas es una forma de violar el derecho a la protesta. Es un objetivo del régimen para ocultar el descontento de la población por los problemas que hay en el país.
Para la abogada, un agente policial puede pedir el número único de identidad a los ciudadanos, pero no se lo puede retener.
Las limitaciones al derecho a la circulación son ilegales, porque no hay nada que lo prohíba en este momento, dijo López.