Con la corresponsal de RFI en Roma, Anne Le Nir.
El presidente italiano Sergio Mattarella, árbitro supremo en caso de crisis política, concluirá su ronda de consultas este jueves 22 de agosto al final de la jornada. Recibirá la delegación del Partido Demócrata y luego la del Movimiento 5 Estrellas (M5S).
Todo dependerá de la respuesta del M5S a la propuesta del Partido Demócrata de formar una coalición gubernamental. Para el Partido Demócrata, no se puede volver a nombrar a Giuseppe Conte como presidente del Consejo. Hay que pasar página.
Además, este partido de centro-izquierda exige compromisos claros en términos de lealtad a Europa y reconocimiento de la centralidad del Parlamento. Quiere un cambio muy claro en la forma en que se aborda la cuestión de la migración.
También pide un punto de inflexión en la política social y económica. En otras palabras: más redistribución e inversión. Y aboga por una política de desarrollo respetuosa del medio ambiente.
Algunas de sus condiciones no deberían ser un problema para el M5S, pero el movimiento podría centrarse en su deseo de un nuevo ejecutivo aún presidido por Giuseppe Conte. Por lo tanto, no se puede descartar una vuelta anticipada a las urnas.