Anunciada en 2013, la desaparición del peso convertible, el C.U.C podría ser inminente, según se rumorea en Cuba. A finales de 2019, el presidente Miguel Díaz Canel anticipaba que el “ordenamiento monetario” estaba en fase avanzada, sin dar más precisiones sobre la fecha en la que Cuba pondría fin a un complejo sistema de doble moneda.
En Cuba desde 1994 circulan el peso cubano (C.U.P.), que vale 24 veces menos que el peso cubano convertible, el CUC, una moneda cuyo curso es controlado artificialmente por el Estado.
La instauración del CUC permitió enfrentar la crisis económica que derivó de la caída de la unión soviética y sirvió de sustituto al dólar, moneda que Cuba no puede usar en sus transacciones internacionales a causa del bloqueo.
Sin embargo, con el tiempo, los economistas han observado que la doble moneda ha distorsionado la medición de la competitividad real de las empresas y ha generado una brecha profunda entre la mayoría de los cubanos que cobran en pesos cubanos, y los que cobran en pesos convertibles, la moneda utilizada por los turistas. Además, cualquier compra de pesos convertibles implica el pago de comisiones.
La corresponsal de RFI en Cuba, Domitile Piron constató que el valor del CUC cayó a 23 pesos cubanos en la calle. Algunos comerciantes y trabajadores independientes rechazan incluso los pagos en pesos convertibles. “Yo lo estoy cambiando todo, lo poquito que tengo. Es mejor cambiarlo ahora”, dijo a RFI Marixa Kiara, que aguardaba desde tres horas en una fila frente a una casa de cambio para deshacerse de sus CUC por temor a que baje su valor en los próximos meses.
El año pasado, el gobierno cubano flexibilizó la circulación del dólar para facilitar el ingreso de liquidez en la isla que enfrenta una crisis económica por las sanciones estadounidenses y la crisis del Covid.